Una història qualsevol.


La gran ciutat li absorbeix la llum del rostre. Amb els anys ha anat perdent els laterals i ara tot li apunta al terra.
Va haver-hi un temps en que va ser-hi conscient, a les seves estones lliures s’obligava a pujar músculs facials i alçar el seu esquelet.

La Carmeta mira el sostre, està més alt. Un cop cada tres anys canvia totes les bombetes. Li demana l’escala al veí, ha perdut un esglaó. No hi arriba, sospira. Es seu a cosir al costat de la finestra, des d’allí mira al banc, mira  l’home, observa  la dona. Ell s’entreté mirant a les noies joves passar i ella, ella es diu Araceli.

A l’Araceli li agrada fer bufandes, agafar flors del parc recent plantades, és diabètica, té l’iris d’un ull lleugerament blavinós, li encanta el color grana, la seva neta se li assembla, encara somia amb sols i balls d’estiu, és tranquil·la i algo tímida. Araceli escriu poemes d’amor tristos i els deixa a la bústia, a la bústia d’ella . . .
Al banc,  ignorada pel món que la rodeja, allí al banc, l’Araceli escriu i mira de reüll la finestra del 2on 1era.

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De coses xicotetes



En la esquina de al lado del colegio abrieron una tienda donde venden pulseras, collares, plumas y lupas. Sí, sí, ¡lupas! Pero tampoco importa porque nadie compra lupas. Con una lupa se te podría ver claramente... pero nada, NO hay TIEMPO para las longitudes bajas ya que suenan a menos, a poco a casi nada y lo que se lleva, deberías saberlo, es todo lo que suene a mucho, a más , a potencialidad, grandiosidad, heroicidad ... es decir, a crecer rápido i en vertical para ser lo mas parecido posible al Único, al Inigualable, al Todopoderoso alter ego de Diós   ... o si mas no, poderle tocar los dedos de los pies aunque estos huelan a rabanitos.
Pero tu , tu tienes la suerte de poder sentarte en un moco a ver pasar gigantones devoradores de minutos, horas, días, semanas, meses ... con su barriga llena van de aquí para allá y de allá para aquí, sin ni siquiera ser de aquí o de allá porque estos, aunque se sientan de aquí como los que mas, en realidad son los que menos saben donde pisan ... y como la gula no se sacia (por eso es gula y no otra cosa) devoran sus vidas, la de los demás, y todo lo que puedan interiorizar y almacenar.
 Pero ¿sabes que? Que tu, señorita, tu eres tan minúsculamente minúscula que no te ven ... ignoran de tu existencia, no eres nada en su mundo, nada de nada de nada y no hay mejor placer, mejor serenidad y lujo que no ser Nada en un mundo de engul(l)idos.

Advertencia: Ojo! La Gula no respeta la inspiración divina del Ego y  hace crecer a lo ancho, por eso debéis recordar que los límites no son seguros, no garantizan el almacenaje de tanto vacío.